La alergia es una respuesta exagerada del organismo contra algunas sustancias, se les llaman alérgenos, estas sustancias no afectan a todas las personas por igual, para muchas son inofensivas y las toleran sin ningún problema.
Nuestro sistema inmunitario está preparado para defendernos de elementos extraños que pueden ser nocivos para nuestra salud, pero por diferentes razones, el cuerpo reconoce algunas sustancias como agresoras y aunque realmente no son nocivas crea anticuerpos frente a éstas, cuando el organismo se pone en contacto con ellas de nuevo el sistema inmunitario intenta pararlas pero de una forma en la que daña al propio cuerpo, produciendo la reacción alérgica que puede ser de diferentes maneras e intensidades.
Existen factores genéticos que predisponen a la persona ser alérgica y factores ambientales que son los que van a desencadenar la respuesta exagerada del organismo. Si en la familia uno de los padres es alérgico hay más probabilidad de que los hijos lo sean.
El diagnóstico de la alergia será mediante consulta médica, que junto con la entrevista y la exploración del paciente, decidirán la realización de pruebas diagnósticas. La más común y sencilla es el test cutáneo o prick test, se colocan gotas de alérgeno en la piel y con una lanceta se hace una pequeña laceración en piel (no es dolorosa) y se espera un tiempo, aproximadamente 20 minutos para ver la respuesta. La respuesta positiva es un habón, parecida a la picadura de un mosquito. También es probable que le pidan un análisis de sangre.
Hay muchos posibles alergenos y el contacto se puede producir de diversas formas:
- Por el aire, como los pólenes, ácaros, hongos…
- Medicamentos
- Por contacto, algunos metales, productos cosméticos…
- Alimentos
- Por picadura de insectos o mordedura, avispas, serpientes.
La respuesta alérgica en muchos casos no es grave, ocasiona molestias que mejoran con los diversos tratamientos , aunque en otras ocasiones sí puede crearlas y se necesita atención médica urgente.
Los síntomas de la alergia se pueden presentar en diversas partes del cuerpo, como en los ojos, en nariz, en el estómago, en la piel y los pulmones. Cuando la respuesta alérgica se produce en los pulmones, los bronquios se inflaman y se contraen, es asma alérgica, pudiendo tener un empeoramiento o crisis asmática al entrar en contacto con el alérgeno. Por esto es muy importante tomar de forma correcta el tratamiento que haya puesto el médico y si se conoce a qué se es alérgico evitarlo.
Aunque la alergia está muy unida al asma, no todas las personas que tienen asma tienen alergia, ni todas las personas que tienen alergia padecen asma.
Hay muchísimas sustancias que pueden producir alergia, pero las principales responsables de las alergias respiratorias son los pólenes, ácaros, hongos y los epitelios de animales.
En primavera es muy común oír hablar de alergia, aunque existan alérgenos todo el año, en primavera los niveles de polen en el aire aumentan, en nuestro clima están muy presente los pólenes de gramíneas, olivo, parietaria. Con la contaminación y el cambio climático, estos pólenes han aumentado su capacidad de provocar una respuesta alérgica, a las personas que son susceptibles a ellas, pero además se están alterando los ciclos de polinización, aumentándose así el tiempo en que los pólenes están en el ambiente.
¿Cómo podemos cuidar la alergia?
Si tiene un tratamiento médico debe seguirlo, antes de hacer un cambio porque se encuentre mejor debe consultarlo con su equipo de salud.
Conocidos los alérgenos que le producen la alergia se deben evitar, al final encontrará páginas de distintas sociedades médicas y de pacientes en las que podrá ampliar la información, ahora veremos las medidas más importantes que podemos hacer frente a los alérgenos más comunes.
Pólenes
- Evitar las salidas al campo o a zonas donde haya abundante vegetación, en especial los días de viento. Conocer la época de polinización de la planta que le produce la alergia.
- Usar gafas de sol para evitar el polen en los ojos.
- Los viajes en coche con las ventanillas cerradas, evitar los viajes en moto y las salidas en bicicleta.
- No cortar césped o barrer terrazas, ya que esto puede remover el polen.
- Airear la habitación a primera hora de la mañana, dormir con la ventana del dormitorio cerrada.
- En casos graves utilizar mascarillas
Aunque cada planta tiene su época de polinización, en primavera hay un aumento de ellas. Puede consultar en Niveles de polen
Ácaros
Conocida como la alergia al polvo de casa. Los ácaros son microscópicos y se alimentan de sustancias que hay en el polvo de la casa, donde más se acumulan es en almohadas, ropa de cama y colchones, nuestra piel se descama y junto con la temperatura y humedad es un sitio perfecto para estar.
- Facilitar la limpieza, evitando elementos de decoración difíciles de limpiar o que acumulen más polvo como las moquetas, alfombras o cortinas gruesas. En especial en el dormitorio de la persona que sea alérgica.
- Se aconseja el cambio de sábanas frecuentes lavadas a temperatura de 55º o 60º. Los colchones y almohadas de látex, viscoelásticos o espuma o poner funda antiácaros.
- Mantener la casa soleada, el sol elimina los ácaros.
- Limpiar con un paño húmedo para no levantar polvo, aspiradora con filtro o de agua y fregona para el suelo.
Hongos
La alergia a hongos o a la humedad, abundan en zonas ocuras y con humedad. Los días húmedos y con viento pueden provocar más síntomas.
- En la casa hay que evitar las zonas donde puedan aparecer humedades. Reparar y utilizar pintura antimoho.
- Si es posible que dé el máximo de sol en el dormitorio.
- Evitar plantas en el interior de la casa y tierra de macetas.
- Limpiar con lejia las zonas con más humedad (baños, lavabos, azulejos)
- Evitar el almacenamiento de alimentos como frutas y verduras ya que se pueden pudrir.
- En el exterior los hongos crecen donde hay vegetación, restos de hojas… También en lugares donde hay suciedad y desperdicios.
Alergia a animales
Los animales que más comúnmente provocan alergia son los gatos, perros y caballos, en este orden, también lo pueden provocar los conejos, hamster y en general cualquier animal con pelo. La alergia la produce la descamación de la piel, esta caspa puede quedar en el ambiente o en la ropa por lo que aunque no esté el animal presente puede producir reacción alérgica. También hay veces que la produce la saliva, la orina o las heces. La caspa del gato puede permanecer mucho tiempo después que el animal se haya retirado o cambiado de sitio.
La recomendación principal ante una alergia al animal es la retirada de éste, en muchos casos esto no es posible por lo que hay que ser muy exagerado en las recomendaciones para evitar los reservorios de los alérgenos, como en sofás, alfombras. Se deben utilizar aspiradoras con filtro. Lavar al animal cada semana con productos específicos para disminuir la descamación de la piel y evitar la entrada del animal en el dormitorio de la persona que sea alérgica.
Como medida de prevención los niños con atopia no deberían tener animales en casa ya que tienen un mayor riesgo de sensibilizaciones (llegar a tener alergia).
La Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica
Libro de las enfermedades alérgicas
Societat Catalana d’Al·lèrgia i Immunologia Clínica
Asociación de pacientes alérgicos